Imbatibles

Corre, sí, corre me dijo aquel hombre ¿a qué se refería? No lo sé, pero, lo haré, correré. Recuerdo mientras pierdo de vista la plaza como era esta calle. A cambiado tanto, pero no queda tiempo. Corro. Sigo corriendo. ¡Un hombre! He de decirle que corra el también. ¿Qué le ocurre en la pierna? No, no puede correr. ¿Le ayudo? No hay tiempo, tengo que correr. Correr y correr más, el final de esta calle, si no recuerdo mal estaba el refugio. ¿Qué es eso? Hay un hombre vestido con un chaleco y con una gran "TV" escrita en él. ¡Ah ya comprendo! Este sabe lo que tiene que hacer, yo voy a seguir... Agh, ¿qué? ¿qué es esto? Calor en el pecho, mucha calor.

- ¿Qué haces con los macarrones, hijo?

- Imitar con ellos como cae el niño de la televisión.

- Pobrecitos ellos, eh. Bueno, cómetelo todo, ya sabes que en África pasan hambre.

Vuelven a ser las 11... Empieza el recreo, a ver, de aquí a la cantina, comer cerca de los profesores y volver aquí. La misión es fácil. Mierda, otra zancadilla, sabía que tenía que salir antes. No pasa nada, no pasa nada. Lo normal es que me hagan solo una al día, supongo que hoy, el resto del día pasará como si nada. Bien, bien, eso está bien. ¡Qué buena la tortilla! No... Mierda, tengo que mear. Bueno, iré a la segunda planta, no suele haber nadie. Aquí hay alguien, mejor me voy a la primera. Buff... Aquí parece que no hay nadie. Aghh ¡qué bien! ¿Qué es esto a lo que huele me recuerda a las lentejas? No importa. Jaja, más de dos sacudidas, paja. Ale a lavarse las manos. Una puerta. No... No.. No... Él no.

- Lleva dos semanas sin venir el carcoma

- Sí, se ve que se ha tomado unas vacaciones de las buenas jajaja

- Sí, está haciendo el perro. Es lo que tiene beber agua de los váteres.